Si bien Jean-Pierre Martinez es conocido por sus comedias de situación (13 y Martes, Strip Poker, Un pequeño asesinato sin consecuencias), también explora en sus obras temáticas contemporáneas, sociales o ambientales, siempre con un toque de humor.
En sus primeros escritos, aborda la cuestión del bienestar animal y denuncia la ganadería industrial, pero a partir de 2019, la ecología se convierte en el tema central de algunas de sus obras, desarrollando un discurso crítico que se inscribe en el género literario de la *Climate Fiction* (Cli-Fi o ficción climática).
I. La ecología como tema central
La ecología se impone como tema de tragicomedia cuando la locura humana llega a poner en peligro su propia existencia como especie. Las dos primeras obras presentan distopías en las que los seres humanos deben enfrentarse a las catástrofes provocadas, en particular, por el calentamiento global.
Tres personas que no se conocen son convocadas a participar en un jurado popular. Al menos eso es lo que les dijeron. Pero el lugar donde fueron reunidas no es un tribunal. Comprenden que están allí para decidir juntos cómo lidiar con las consecuencias de una catástrofe inevitable que debe golpear al mundo en un futuro muy cercano. Las opiniones divergen y acontecen abundantes giros para relanzar el debate. A lo largo de este espectáculo inmersivo, el público también será llamado a expresar su opinión para guiarles en sus elecciones, de modo que tomen la mejor decisión posible para enfrentarse a la peor situación imaginable.
En una Tierra que se ha vuelto inhabitable debido al calentamiento global, una humanidad moribunda está viviendo sus últimas horas. Dos hombres y dos mujeres están a punto de partir en una nave espacial hacia el planeta desconocido que podría servir como su último refugio. La misión de estos cuatro “elegidos” : dar a la Humanidad la oportunidad de perpetuarse después de haber causado su propia desaparición a través de su locura autodestructiva. ¿Pero tal humanidad realmente merece ser salvada? No todos están de acuerdo…
Una pareja de astronautas se dirige a Marte con el objetivo de establecer una colonia y sentar las bases de una nueva Humanidad... más humanista. Tras un misterioso accidente, este viaje espacial se convierte en un viaje en el tiempo... Entre un futuro apocalíptico y un pasado que lleva consigo las semillas de las catástrofes por venir, puede ser tentador querer reescribir la Historia... ¡y por qué no la Biblia!
II. Diferentes dimensiones de la ecología a través de las obras
1. Impacto de la actividad humana en el medio ambiente
Muchos sketches mencionan las consecuencias de las catástrofes ambientales en un futuro más o menos lejano.
Contaminación
Extracto del sketch Atmósfera (del recopilatorio Albán y Eva)
Albán – Hoy se respira un poco mejor, ¿no?
Eva – Sí. Casi me dan ganas de salir sin máscara de gas.
La explotación de los animales
La denuncia de la explotación industrial de los animales se aborda en numerosos sketches. El humor surge de los conflictos que pueden surgir en las parejas sobre el hecho de comer o no carne.
En el sketch Corazón sensible del recopilatorio A corazón abierto
Ella – ¿Comes carne?
Él – Eh… sí. Bueno, no.
Ella – Pero comes jamón…
Él – Sí, pero… El jamón no es realmente carne, ¿o sí?
Ella – ¿Viste el último informe de L214 sobre la cría de cerdos en jaulas?
Él – No.
Ella – Creo que si lo hubieras visto, ya no comerías jamón…
Él – Perdóname, yo… No lo sabía…
Ella – Eso es lo que decían los alemanes después de la guerra sobre los campos de concentración.
Él – ¿Qué decían?
Ella – No lo sabía…
Él – De acuerdo… entonces… eres vegetariana.
Ella – Vegana.
Ver también:
- Esto no es un drama en el recopilatorio Dramedias
- Carne en el recopilatorio Albán y Eva
- Pequeño comercio en el recopilatorio Ella y Él: Monólogo interactivo.
El tema también se aborda en Strip Poker y Después de nosotros el diluvio(Guiño a la asociación L214 con el planeta Y214).
2. El fin de la humanidad: la extinción de la especie humana
Extracto del sketch: No es el fin del mundo (del recopilatorio Breves del Tiempo Perdido)
Alban – Dos horas. Para un examen de conciencia, es un poco corto, ¿no?
Eve – Para un inventario individual, antes de rescindir el contrato, no necesariamente. Pero para hacer el balance de toda la humanidad…
Alban – ¿Qué dirías tú? ¿En general positivo?
Eve – No se trata solo de poner lo positivo en la balanza con lo negativo. También hay que ver todo lo que hay entre los dos. La materia oscura. La insignificancia. La absurdidad.
Alban – Si todavía pudiéramos dudar de lo absurdo de este mundo, la insignificancia de su fin debería terminar de desanimar a quienes aún creían en Dios.
Eve – Ellos te hablarían del apocalipsis y del castigo divino…
Alban – Hasta ahora, mi religión era más bien «después de mí, el diluvio». No pensé que el diluvio podría ocurrir en vida…
Extracto del sketch Terminal (del recopilatorio Albán y Eva)
Albán – Esta vez, ya está.
Eva – Somos los últimos.
Albán – Es la última noche del último día.
Eva – ¿Cuánto tiempo nos queda?
Albán – Una hora más de electricidad.
Eva – Después, se apagará el aire acondicionado.
Albán – Vamos a morir de calor.
Eva – Ya estamos muriendo de calor, ¿no?
Albán – Pero ahora, realmente vamos a morir…
Eva – Tengo sed. ¿Queda algo para beber?
Albán – Queda una manzana.
Ella toma la manzana y se la ofrece.
Eva – ¿La compartimos?
Albán – Me dejo tentar…
Ella corta la manzana en dos y ambos comen su mitad en silencio.
Eva – Nuestra última cena. A solas.
Albán – La última manzana, del último manzano. Antes de que el jardín sea devorado por las llamas del infierno.
El humor como arma definitiva
Evitando cualquier discurso moralizador, Jean-Pierre Martinez aborda a través de sus obras y sketches los desafíos ambientales que enfrenta nuestro planeta, sensibilizando al público y llevándolo a reflexionar sobre sus propias contradicciones o las absurdidades de ciertas actitudes frente a estos desafíos.